Trabajo cooperativo con los padres de Familia


El trabajo cooperativo forma parte de la vida cotidiana, aunque no necesariamente los pequeños lo experimentan de manera formal dentro del salón, si son capaces de organizar juegos, asignar roles y buscar el bien común cuando de esto se trata. La manera en la que se organizara el trabajo cooperativo dentro del grupo, deberá impactar en el hogar para que los padres de familia generen nuevas experiencias en los pequeños.



            Algunas de las características del trabajo cooperativo que nos permiten situarlo como la estrategia idónea para poder seguir aprendiendo son:



·         Colaborar con otras personas para resolver de forma creativa, integradora y constructiva las interrogantes y los problemas identificados a partir de la experiencia diaria utilizando los conocimientos y los recursos materiales disponibles.

·         Actuar con autonomía y responsabilidad en las actividades habituales y en las relaciones de grupo, desarrollando las posibilidades de tomar iniciativas y de madurar en el establecimiento de relaciones personales.

·         Colaborar en la planificación y realización de actividades en grupo, aceptar las normas y reglas que oportunamente se establezcan, articular los objetivos e intereses propios con los de los otros miembros del grupo,  respetando puntos de vista distintos y asumir responsabilidades que correspondan.

·         Obrar de acuerdo a los valores básicos que rigen la vida y la convivencia humana de forma habitual y apreciar su importancia.[i]



El trabajo cooperativo implica un gran compromiso de todos los actores comprometidos con el objetivo de este proyecto, los padres de familia sin duda con pieza clave para el logro de este, la manera en que ellos apoyen la organización de las actividades y en la forma en la que se involucren de gran impacto en la educación de sus hijos.



[i] El aprendizaje cooperativo.